Agua: Un reto de gestión en la agricultura
El agua plantea uno de lo mayores retos a nivel mundial en el sector de la agricultura, es un factor indispensable en la producción de alimentos, sin agua no hay agricultura, ni cultivos. Según la FAO, se prevee que para 2050 aumente la producción agrícola en un 70% por la demanda de alimentos y el crecimiento de la población. Por esta razón es crucial mejorar la forma en como se gestiona este recurso y centrar la atención en prácticas sostenibles que permitan mejorar su gobernanza pues no es el único sector que la requiere.
Según el Estudio Nacional del Agua 2022 elaborado por el IDEAM y Min Ambiente, el sector agrícola ocupa el primer puesto en demanda hídrica en el país con 13.984,1 millones de metros cúbicos al año 2022, con una participación del 43,2% del total del agua usada en Colombia, desde 2016 se ha reducido su porcentaje que era de un poco más del 50%. Sin embargo, su uso en muchos casos sigue siendo insostenible.
Según un análisis de la revista Portafolio, “el 48% de las aguas destinadas al riego de cultivos se desperdicia como consecuencia de factores tales como la ineficiencia en el uso del recurso hídrico, el deficiente mantenimiento de infraestructuras de suministro, entre otros”. Colombia tiene una deuda con el agua pero al mismo tiempo una oportunidad de implementar su uso sostenible y eficaz en la actividad agrícola con acciones como
- Reutilización de aguas residuales
- Adopción de sistemas de riego con nueva tecnología
- Producir más con menos - Estrés hídrico
Un aspecto clave es buscar formas innovadoras y responsables para producir más con menos recursos hídricos disponibles. El estrés hídrico ya está presente en muchas regiones agrícolas colombianas debido a factores como cambios climáticos y patrones irregulares de lluvia. Por lo tanto, es imprescindible desarrollar prácticas agrícolas resilientes al cambio climático y que se adapten a las condiciones locales.
La reutilización de aguas residuales, la adopción de nuevas tecnologías en sistemas de riego y trabajar hacia una mayor productividad con menor consumo hídrico son aspectos clave para garantizar un futuro sostenible tanto para nuestro sector agrícola como para nuestro país.
Fuentes :
FAO
IDEAM
Min Ambiente Portafolio