Agricultura sostenible: un compromiso en pro del cambio climático

El sector del agro en Colombia es uno de los más afectados por el cambio climático: eventos como el fenómeno del niño amenazan la seguridad alimentaria, el recurso hídrico y las condiciones climáticas para el sector ganadero.  

Según informes del Banco de la República, “por efectos del cambio climático los periodos de lluvia y de sequía se hacen cada vez más prolongados y severos. Si los productores agrícolas no se ajustan a esta nueva realidad se puede prever escacez y aumento en el precio de los alimentos”.  

Ante este panorama, la adaptación se vuelve fundamental para la supervivencia del sector agrícola colombiano. Los agricultores deben adoptar prácticas agrícolas resilientes al clima, como la diversificación de cultivos, la introducción de variedades más resistentes y la implementación de técnicas de conservación del suelo. Asimismo, la incorporación de tecnologías modernas, como sistemas de monitoreo climático y métodos de riego más eficientes, pueden ser clave para enfrentar los desafíos del cambio climático.

Así mismo, seguir los lineamientos de buenas prácticas agrícolas, buen manejo de los suelos, ligarse a las certificaciones de productos cultivados con buenas prácticas y que generan más valor en el mercado, todo enmarcado en un objetivo de agricultura sostenible.  

El cambio climático es una realidad, que afecta la seguridad alimentaria y la economía del sector, sin embargo, esta realidad también nos presenta una oportunidad crucial para asumir responsabilidad y liderar acciones transformadoras.